La Procuración General del Chubut envió a la Legislatura provincial un proyecto de reformas al Código Procesal Penal que se aplica en esta provincia desde el año 2006. La reforma contempla a los fiscales al frente de la investigación y las facultades que poseen, el fenómeno social de la violencia de género y la necesidad de acelerar los tiempos procesales.
Los puntos sobre los que se proponen reforma son 10 pero aquí nos dedicaremos especialmente al de violencia de género.
Dado que la iniciativa propone una tercera posibilidad para dictar una prisión preventiva, además de los peligros de fuga y de entorpecimiento. Es para los imputados por violencia de género que violen medidas de protección, muestren “falta de voluntad” de someterse al proceso o intenten influir en la víctima. “Lamentablemente en estos casos hay mucha repitencia y
eso debe ser un elemento importante a la hora de dictar una medida de coerción gravosa” sostuvo el procurador general del Chubut, Jorge Miquelarena.
El tercer cambio es considerar que hay peligro de fuga cuando sobre el sujeto ya pese una condena de primera instancia con prisión de efectivo cumplimiento. La idea es que el sujeto culpable quede preso aunque el fallo no esté firme, para evitar que se fugue, ya que este riesgo se acentúa. No dejarlo libre a la espera de lo que decida la Cámara Penal.
El caso de Lorena Paredes, es uno de los que tomó estado público y pone en evidencia la des protección de las víctimas de violencia de género en Chubut, pero sin dudas son cientos las mujeres que necesitan que esta reforma se concrete y se aplique de inmediato.