La información que nos deben. Los vecinos y las vecinas de la costa sur de #Chubut sufren reiterados cortes del servicio del agua «para recuperar reservas».
Desde la #SCPL afirman que solo registran consumo para humanos sin embargo el uso del agua dulce para la explotación petrolera es un secreto a voces. El Instituto Provincial del Agua (IPA) no informa y no regula el mal manejo del recurso que realizan los productores de la zona de #Sarmiento, que desvían el río Senguer (que tributa en el Lago Musters); tampoco controla el uso para la explotación petrolera.
Mientras las fuentes oficiales siguen apuntando al consumo ciudadano, publican fotos de las piletas y ponen a circular discursos de odio contra las ocupaciones de tierras en los barrios. «Pinchan un caño y tienen agua», dicen. Pero no hay punto de comparación.
La arena arrasando todo a su paso, es el símbolo de la falta de planificación, de lo explotación a destajo de los recursos naturales. El supuesto impacto económico positivo en la región de la Cuenca del Golfo San Jorge es un discurso que entra en crisis en momentos en el que el sistema sanitario goza de una debilidad preocupante. Si eso se traslada a otros derechos universales como el Derecho a Educación las mentiras se caen a pedazos. Solo el 30% de los niñxs y jóvenes tuvieron clases en el 2020 porque no se pagaron en tiempo y forma los salarios docentes pero tampoco se garantizó el acceso a computadoras y conectividad. El costo de sostener esta matriz productiva es cada día más alto. Se cuentan por cientos lxs niñxs que asisten a comedores o reciben viandas que sostienen lxs mismas vecinxs.
#AguaParaLaVida es el debate #hoy y las autoridades deben estar a la altura de las circunstancias. Hay un punto que tener dinero para «comprar la botellita», como dijo Jorge Ávila del Sindicato de Petroleros no les alcanzará ni a ellxs. El desprecio por la vida de esta dirigencia ya casi no sorprende.