Se cumplen 10 años de la desaparición de Reimundo Nazario Pino, trabajador rural, miembro de la comunidad mapuche tehuelche de la Meseta de Chubut.
Raimundo Pino viajó junto al patrón Eliberto Sepúlveda, quien -según dijo- lo dejó en el establecimiento El Portezuelo a unos 40 km de Gan Gan. Allí fue visto por última vez la madrugada del 9 de julio de 2011, por el peón Elbio Cumil. Eran días en que la ceniza del volcán Puyehue, no permitían ver nada, en toda esa amplia zona de la Meseta. Por ese motivo también las instituciones suspendieron por varios días los rastrillajes de su búsqueda, sin embargo su familia siguió.
Hortencia Hueicha, madre de Reimundo y lonko (autoridad) de la comunidad Los Pino, golpeó todas las puertas para que no se abandone la búsqueda.
Esta familia busca también a Narciso Pino, primo de Reimundo, quien desapareció de un establecimiento rural donde estaba haciendo trabajos por día, en la zona de Talagapa a unos 45 km de Gan Gan. Ya son ocho meses desde el 3 de Noviembre último, que no se lo encuentra, pese a que se activaron varias búsquedas, usando otros recursos como el helicóptero que participó del rastreo. Si bien se encontraron rastros, aun las autoridades gubernamentales y la justicia no pudieron explicar qué pasó con él.
10 AÑOS SIN RESPUESTAS
“La vida no vale nada” expresaban los pobladores de la meseta hace unos años al recordar la desaparición y al ver las actuaciones de la Fiscalía de Puerto Madryn donde descansa el expediente del caso 24.206, sobre la desaparición de Raimundo Nazario.
La impunidad marca la vida de los habitantes de la Meseta. Desde fines de la década del 90’ las comunidades indígenas denuncian muertes que quedaron impunes y recuerdan a: Cervantes Huayquilaf, Daniel Muñoz, Victoriano Cual, José Pichalao, Juan Crespo y Juan Carlos Cañiu, además de los desaparecidos.